Para el 60% de las empresas, las redes sociales siguen siendo un lugar para el monólogo
http://www.scoop.it/t/ple-by-ezequiel-amadohttp://www.scoop.it/t/ple-by-ezequiel-amado
Un estudio realizado por la consultoraPricewaterhouseCoopers, PwC, ha intentado arrojar más luz sobre la relación de 190 empresas alemanas con el universo social media, y los resultados son variopintos.
Cada vez es mayor el número de empresas activo en las redes sociales, unas cuatro de cada cinco utilizan Facebook y YouTube; y dos de cada tres están activas en la red de noticias cortas Twitter.
Sin embargo, la mayor parte de las empresas encuestadas utiliza las redes sociales como si de un medio tradicional se tratase, olvidándose de que a través del universo social media se pueden crear relaciones recíprocas con los clientes, probar innovadores formatos publicitarios, etc.
Por otro lado, es curioso observar que sólo el 28% de las empresas utilizan las redes sociales para estudiar el mercado a través de los datos de los internautas, de encuestas y preguntas abiertas.
Las redes sociales parecen seguir siendo mayoritariamente una plataforma en la que la empresa difunde informaciones promocionales sin pararse a escuchar las opiniones, sugerencias y datos que los consumidores puedan aportar y que ayudarían a mejorar el funcionamiento de la empresa.Son los propios ciudadanos digitales los que adhieren, copian, imitan y viralizan las buenas prácticas y descartan, bloquean, penalizan y denuncian las malas. Así se va escribiendo la historia de la Cultura Digital. Todo lo que hasta ahora se ha publicado sobre esta nueva cultura es solamente orientativo, y así como no existen manuales para ser buenos padres, tampoco existen, por ahora, guías concluyentes de cómo ser ciudadanos, profesionales y/o empresas digitales.
Para entender cómo son, cómo funcionan y para qué sirven las redes sociales, y aprender a moverse en ellas hay que estar y atravesar la experiencia, primero, a título personal. Y esto, no implica interactuar, conversar, dar Me Gusta o postear.
Esto implica darse de alta un perfil en Linkedin, en Facebook, en Twitter y observar, porque cada red tiene sus reglas y su lógica. Probar con alguna acción y observar qué sucede. Y entonces, recién ahí, desde la propia experiencia y los objetivos de negocio, empezar a pensar las posibilidades y el alcance posible.
Cada día los grupos de intercambio profesional en Facebook y Linkedin recogen la frustración y el desánimo de los jóvenes porque sus Jefes fijan objetivos y les exigen unos resultados que no se corresponden con las características y posibilidades del canal.
Sabemos por observación de lo que viene sucediendo, que Facebook empieza a instalarse como el nuevo Centro de Atención al Cliente y esto funciona como atractor para construir comunidad. Y sabemos que se puede generar acciones que seduzcan al público para sumarse y participar. Pero no existe una fórmula probada para garantizar que se pueda alcanzar un cierto número de fans en un período determinado. Y mucho menos garantizar que el tráfico generado desde las redes hacia la web, se materialice en ventas concretas. Y toda vez que este tipo de objetivos está atado a una remuneración variable, que se cobra y sólo si se alcanzan los números proyectados, y no hace más que generar un gran malestar que impacta directamente en la actitud y entusiasmo que se requiere en la gestión diaria de las redes sociales
.http://www.marketingdirecto.com/actualidad/social-media-marketing/para-el-60-de-las-empresas-las-redes-sociales-siguen-siendo-un-lugar-para-el-monologo/
No hay comentarios:
Publicar un comentario